Se trata de una especie de dron circular, como una pequeña bolita con hélices, que vuela sin necesidad de mando.
Tiene un sensor en la parte de abajo y se eleva según se ponga algo debajo, la mano por ejemplo.
Nunca chocará con el suelo pues el sensor evitará el golpe, pero si lo elevas demasiado sí que puede chocar con lo que esté arriba (lámpara, árboles, etc.).
La bola tiene luces de colores, por lo cual puede usarse en la oscuridad ya que será muy vistoso y divertido.